Te libero.
Tú no lo sabes, pero te estoy liberando de mí.
Dices haber hallado en mi regazo la mejor compañía, cuando jamás
encontrarás mayor soledad que la que yo te ofrezco.
Dices haber encontrado en mí la paz, sin saber que la vida conmigo
sería una consecución de batallas.
Dices haber hallado en mí la solución a tus problemas,
cuando jamás tendrás mayor problema que yo misma.
Dices haber visto en mí la luz, cuando yo solo emito
oscuridad.